Empecemos con este frangmento del libro «El Choque de Culturas«, de Jean Donaldson:
«Se ha regañado a un perro cada vez que se le ha descubierto mordiendo los muebles. Ahora el perro se abstiene de morder los muebles cuando el propietario está en casa pero se vuelve destructivo cuando se queda solo. Cuando el propietario llega a casa y ve los destrozos, el perro se escabulle, con las orejas para atrás y la cabeza gacha.»
Ahora vamos a ver: ¿quién cree que el perro sabe que ha hecho mal y por eso se esconde?¿De verdad piensas que los perros a los que no les gusta quedarse solos en casa roen los muebles y destrozan lo que encuentran a su paso en un acto deliberado de venganza contra sus propietarios?
Bueno, pues no eres el único. En realidad, la mayoría de gente piensa así. Sin embargo, afortunadamente las ansias de venganza están reservadas para la raza humana y el resto del reino animal no es tan retorcido.
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Entonces, ¿por qué el perro se esconde cuando el propietario llega a casa, después de habar mordido los muebles?
Citando de nuevo un fragmento de El Choque de Culturas:
«El perro se da cuenta de que morder los muebles es peligroso cuando el propietario está presente, pero que no hay ningún peligro cuando éste se ausenta. El perro se encuentra ligeramente ansioso cuando se queda solo y mordisquear algo le hace sentirse mejor. Más tarde, cuando el propietario vuelve a casa, el perro realiza señales de calma (señales apaciguadoras) para evitar o aplacar el castigo que sabe que le suelen aplicar llegado ese momento. La llegada del propietario a casa y/o la conducta que precede al castigo (o sea, haber mordido los muebles) se han convertido en un aviso: el perro sabe que está a punto de recibir un castigo. No sabe por qué».
Así que ya lo ves: no sirve de nada castigar a tu perro cuando llegas a casa y descubres que ha destrozado aquello que tanto te gustaba. Tampoco cuando ves que se ha subido a la cama o al sofá mientras estabas fuera. No lo entenderá. Por eso, lo mejor es buscar la raíz del problema y atajarlo desde la base.
Si tu perro mordisquea, quizás esté ansioso por algún motivo, o tolere mal tu ausencia. También puede que lo haga por aburrimiento, y en este caso tendrás que encargarte de dejarle «cosas que hacer» mientras estés fuera. En definitiva, lo que necesitarás es descubrir cuál es la verdader raíz del problema y trabajar una terapia de reducción de estrés, enriquecimiento ambiental… Cada caso es particular y necesitarás analizar bien sus circunstancias. Un etólogo canino puede ayudarte a hacerlo.
10 Comments
entonces…..si entiende que cuando llega el amo y el ha mordido los muebles hay castigo? relaciona la mordida de mueble con el castigo?
tengo entendido que la cosa seria….el perro muerde el mueble y se le olvida….el dueño vuelve a casa, ve el mueble mordido y entonces se pone tenso, alza la voz, riñe,,,y el perro empieza con el ritual de señales de clama, que en realidad parece un sentimiento de culpa, pero no es, es un metodo de apaciguamiento (que es donde la gente dice..ves como si lo sabe!! como se esconde?, claro coño si estas histerico! el perro quiere desaparecer jajaj)….pero el no sabe pk se ha enfadado el dueño, sino seacciona al enfado con señales de calma…es eso lo que quieres decir??? no he entendido bien…
coooooooooorrecto!!
El problema viene cuando no recibe respuestas a todo el arsenal de respuestas enviado. No solo no recibe respuesta sino que nos ponemos todavia más enfadados.
De ahí la importancia de conocer el lenguaje de aquellos con los que convivimos.
Pues sí, el problema suele estar en que no nos entendemos… Por eso hay que aprender a «hablar» el lenguaje de nuestros perros!
Gracias por tu comentario, Jordi. Un saludo.
Magnifico el post y magnifico el libro, estoy leyéndolo y es un nuevo descubrimiento hacia mi torpeza en cada pagina. Mis peludetes y yo estamos aprendiendo juntos a entendernos mutuamente
Gracias, Tony. Me alegro de que te guste el post y, sobre todo, el libro. A mí me pareció muy interesante.
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Hola mi hijo hace cosa de dos meses adoptó a un perro en la perrera municipal, bueno por lo que escribo es porque cada vez que se va de casa le tira todas las cosas las mordisquea en fin parece una casa robada cuando lo hace. Tiene unos 9 meses más o menos, y bien que se puede hacer en estas ocasiones porque no sabes cuánto va a durar rompiendo mandos y demás, como actuar con esto si alguien me lo puede explicar gracias. Por último no se si tendrá alguna referencia poner la raza que es, un mixto de bretón u spaniel.
mi perra american stanford me hace lo mismo me destroza todo lo que vea..estuve 2 meses dándole pastilla que me mando el veterinario..y fue muy efectivo..se la quite porque se quedó preñaada durante el embarazo de portaba muy muy bien y el primer mes de dar a luz tambien pero desdes que no tiene a los cachorros otra vez igual..ni el cong ni pelotas ni huesos de jamón ni nada de nada…llevo 1 y año y 4 meses en mi piso y stos son los terceros sillones que compro..no la quiero dar ni la voy a dar porque es muy muy buena pero ya no se que hacer..salgo a la calle con ansiedad deseando de llegar a casa para que no este mucho tiempo sola..me voy a trabajar y se tiene que venir aquí una persona con ella si no no trabajo agusto..me influye asta a la hora de trabajar por que estoy todo el rato pensando enque me abra echo ya no se que hacer más de verdad..gracias y saludos
Tengo dos perras. No suelen destrozar nada. Pero un día estuvieron solas veinte minutos que fui a la compra y me encontré un papeleo que tenía encima de la mesilla destrozado y baboseado encima de la cama, una caja en la que guardaba un reloj también, la puerta una habitación que siempre está cerrada, abierta (saben abrir pero nunca lo hacen) y su pelota de juego (que suelo dejar en la mesa alta de la entrada metida en una bolsa de cacas) también encima de la cama y la bolsa hecha m*.
No entiendo por qué pudo ser, pero las reñí nada más llegar a casa y ver la habitación, que está a la vista nada más entrar. Me vinieron a saludar e ignoré su saludo de felicidad porque yo no estaba nada contenta con la situación, y fuimos las tres a la habitación. La cachorra Sharpei seguía de pie en ma cama moviendo el rabo como si no le importase que las estuviera regañando, y la Bóxer de cuatro años me miraba con cara de pena y orejas agachadas mientras se quedaba sentada en la cama.
Nunca lo habían hecho, no entiendo qué pudo pasar y no sé cómo podría reaccionar si llegase a volver a ocurrir.
¿Algún consejo?