A partir de ahora, intenta que tus palabras de afecto, mimos, felicitaciones y carantoñas, le lleguen a tu perro a través de su oído izquierdo. Las órdenes o comandos que quieras que entienda con precisión, por el derecho.
¿Por qué? Te lo cuento enseguida y luego me dices si te parece buena idea 😉
Un reciente estudio científico, publicado en la revista Current Biology, ha descubierto que los perros prestan atención tanto al significado concreto de nuestras palabras como al tono y la implicación emocional con que las pronunciamos y que, para procesar uno u otro tipo de información, utilizan diferentes hemisferios del cerebro. Con el derecho, procesan las palabras y sus significados, y con el izquierdo los matices tonales-emocionales.
El estudio gira en torno a un interesante experimento realizado por la doctoranda Victoria Ratcliffe en la Universidad de Sussex (Reino Unido). Y hay que tener en cuenta los resultados obtenidos porque es posible que nos ayuden a mejorar la comunicación con nuestros perros.
EL EXPERIMENTO
El experimento contó con la participación de 250 perros. Con cada uno de ellos se llevó a cabo la misma prueba: se colocó al animal en el centro de una sala y se ubicó un altavoz a su derecha y otro a su izquierda. A través de estos dos altavoces, se le dio al perro la orden “Ven aquí”. En un primer momento, la voz a través de los altavoces sonó de forma natural (palabras + matices tonales/emocionales). En sucesivas repeticiones, el mensaje sonoro se modificó para eliminar la parte verbal y dejar sólo la emocional, o a la inversa.
En este vídeo puedes escuchar cómo sonaba en cada caso:
VÍDEO «Orienting Asymmetries in dog responses to different communicatory components of human speech»
El experimento sirvió para comprobar hacia qué lado giraban la cabeza los perros según si la información que les llegaba de los altavoces era de un tipo u otro (en todos los casos los dos altavoces sonaban igual, y a la vez).
El resultado fue curioso.
LOS RESULTADOS
Efectivamente, los perros utilizados para llevar a cabo el experimento giraron su cabeza hacia uno u otro altavoz dependiendo de las características del mensaje sonoro que se emitía.
Cerca del 80% de los perros giraron hacia la derecha cuando la voz pronunciaba palabras concretas y hacia la izquierda cuando sólo se mantenía el tono y los elementos emocionales de la secuencia sonora.
Esto podría parecer una banalidad si no fuera porque significa algo muy importante: que los perros son capaces de distinguir entre secuencias sonoras con significado o sin significado. Son, de algún modo, capaces de entendernos. No sabemos todavía en qué medida pero este experimento apunta hacia una capacidad de comprensión mayor de la que hasta ahora algunos expertos contemplaban.
Por otro lado, del estudio también se desprende el hecho de que los perros utilizan distintos hemisferios del cerebro para procesar ambos tipos de información. El derecho, es usado para distinguir las emociones contenidas en las secuencias sonoras. El izquierdo, para diferenciar las palabras y su significado. Justo al revés del lado hacia el que giraron su cabeza durante el experimento.
LO QUE MÁS TE INTERESA: LA APLICACIÓN PRÁCTICA
Vistos los resultados de este estudio científico, ahora hay que probar si pueden servir para mejorar la comunicación con nuestros perros. Con lo que sabemos después del experimento, se trata de escoger el lado correcto a la hora de hablarles.
Para órdenes y comandos que queramos que interpreten con precisión, el oído derecho. Para animarlos, felicitarlos, etc., el izquierdo.
Probad y me contáis si os funciona 😉